«Que tu conducta sea irreprochable en todo momento; que el amor que arda en tu corazón comunique el fuego sacro a todos».
Lira el Corazón, pág. 36.
«Que tu conducta sea irreprochable en todo momento; que el amor que arda en tu corazón comunique el fuego sacro a todos».
Lira el Corazón, pág. 36.
“Mucho les encargo, hijos, los coches, debemos tratarlos como a NIÑAS BONITAS, para que nos duren mucho… la santa pobreza es muy delicada, y pagaremos en el PURGATORIO los desperfectos que hagamos, por descuido”.
Carta colectiva del 4 de octubre de 1958, desde Roma.