Si llega la tristeza…

«Si la tristeza nos llega, que sea únicamente por haber ofendido a Dios, o por no haber correspondido, como debiéramos, a sus gracias, a su divino amor. Pero después de haberle pedido perdón, estemos seguros de haber sido perdonados y escuchados.

Octubre 15 de 1955.

No a la tristeza…

«No nos inquietemos ni nos pongamos tristes, porque ello puede ser soberbia, amor propio. Sobre todo no perdamos la paz porque donde no hay paz no está Dios».

Cartas.

No hay cabida para la tristeza…

«En las regiones superiores de su alma jamás hay cabida para la tristeza; es un gozo no interrumpido, que prorrumpen aclamaciones de admiración, de inefable gratitud, por todas las obras maravillosas que su Dios ha obrado en su alma, sirviéndose de su inmensa miseria».

Postula a me et dabo tibi gentes.

Vencimiento…

1537 Altar beata«Qué tristeza si llegamos al fin de nuestra vida con las manos vacías, sin habernos vencido, si sólo hemos dado culto a nuestro yo erigido en el centro de nuestra alma, en donde no está Dios, porque él no está en el egoísmo, y así nuestra desilusión, nuestro disgusto, la pérdida de la paz, de la alegría, del mérito, y hasta de la vocación, llegando, como podemos llegar, a hacernos insufribles a cuantos nos rodean. ¿Verdad que vamos a reaccionar?»

Carta colectiva desde Madrid el 25 de septiembre de 1969.

El desaliento no ayuda para nada…

1519 IMG_2773«Alguien dice que se desalienta cuando comprueba sus defectos. Le pregunto, ¿el desaliento le ayuda a ser mejor? ¿Verdad que no? Ese desaliento es orgullo, es soberbia.»

Cartas.

Animarse siempre…

1244 IMG_0762«Nada de desalientos, ni de tristezas, ni de apachurramientos».

Carta a dos religiosas, Cuernavaca, septiembre 6 de 1955.

Acompañar al Papa…

1090 IMG_0388«Hoy día los sufrimientos angustiosos de nuestro Santísimo Padre el Papa, deben ser para nosotros sufrimientos, y comulgando con sus sentimientos ofrecer a Dios nuestras plegarias, sacrificios, trabajos etc. etc., hay una necesidad enorme en la Iglesia en el mundo entero de ellos «Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias…» deben ser gozos y esperanzas, tristezas y angustias para los cristianos de hoy».

Carta colectiva desde Roma, el 28 de agosto de 1971.

Siempre en positivo…

1080 Sakura y sonrisa«Nada de desalientos, ni de tristezas, ni de apachurramientos».

Carta personal.

Alejar la tristeza…

1040 Sin título«Si alguna vez acontece al misionero tener tristeza por algún incidente penoso, procura alejar de sí cuanto antes, este horrible mal, que acaba muchas veces con las más santas vocaciones… ofrece a Dios Nuestro Señor el motivo de tu tristeza, y, para arrancarlo de raíz, dale gracias por ello, pues debes saber, por el espíritu de fe, que así te lo dice, que todo lo que te sucede es permitido por Dios o enviado directamente por Él, y así procurarás adherirte incondicionalmente a todos sus adorables quereres».

Lira del Corazón, Primera parte, Capítulo XII.

Nada de desalientos…

656 1959 dic. Adiós a misioneras Indo. y S. Leone

«Nada de desalientos, ni de tristezas, ni de apachurramientos».

Carta a dos religiosas, Cuernavaca, septiembre 6 de 1955, f. 3152.