Confiar en Dios…

«Sé que el Juez divino me perdona y me ha perdonado siempre; sé que mientras con su misericordia, por su misericordia él me conceda confiar y confiar contra toda esperanza, no podrá hacer nada en mi contra. La confianza, como él mismo lo ha dicho, le ata las manos».

Ejercicios Espirituales de 1962.

El retrato de un mundo sin Dios…

«Por este mundo tan lleno de paganismo, de miserias, de pecados, de horrible materialismo.¡Qué ha pasado con tu amor, Dios mío! ¿En dónde lo has ocultado? ¿Qué haces Señor que no lo haces vibrar en millones de corazones? Ve que son todos tuyos, que tú los amas con ese tu amor inefable que te impulsó a crearlos y a redimirlos; ¿cómo es que permites que se hundan en las sombras de la muerte? Jesús.»

Ejercicios Espirituales de 1962.

Inspirarse en los libros…

«Laus Deo et Mariae. Meditación de la mañana antes de la santa Misa, tomada de ‘Esposas del Señor’, por Josef Staudinger, S.J., sobre ‘Dios es amor’. Hice la lectura a la comunidad; desde las primeras lineas mi alma se abismó en ese misterio de misterios: el amor de Dios. Dulcísima comprensión. ¡Inefable dicha! ¡Amor de Dios a sus criaturas; a mí especialmente! ¡Cómo lo he saboreado, cómo invadió mi alma! No hay palabras para explicar esto, ni para razonar con ellas, únicamente hay abundancia de lágrimas para sentirlo, para agradecerlo, para gustarlo, para tratar de derramarlo por el mundo entero».

Ejercicios Espirituales de 1962.

Misterio de misterios…

«Misterio de misterios: el amor de Dios. Dulcísima comprensión, —inefable dicha— ¡Amor de Dios a sus criaturas; a mí especialmente! ¡Cómo lo he saboreado, cómo invadió mi alma! No hay palabras para explicar esto, ni para razonar con ellas, únicamente hay abundancia de lágrimas para sentirlo, para agradecerlo, para gustarlo, para tratar de derramarlo por el mundo entero».

Ejercicios Espirituales de 1962.

El amor de Dios…

3376 IMG_6869.jpg«Misterio de misterios: el amor de Dios. Dulcísima comprensión, ¡Inefable dicha! ¡Amor de Dios a sus criaturas; a mí especialmente! ¡Cómo lo he saboreado, cómo invadió mi alma! No hay palabras para explicar esto, no para razonar con ellas, únicamente hay abundancia de lágrimas para sentirlo, para agradecerlo, para gustarlo, par tratar de derramarlo por el mundo entero».

Ejercicios Espirituales de 1962.

Un amor único…

3267 aptura de Pantalla 2019-11-16 a la(s) 18.33.13.png“Dulcísima comprensión. ¡Inefable dicha! ¡Amor de Dios a sus criaturas; a mí especialmente!

Ejercicios Espirituales de 1962, f. 908.

El amor de Dios…

3190 Capilla de Vietnam.png«El amor de Dios. Dulcísima comprensión. ¡Inefable dicha!”

Ejercicios Espirituales de 1962.

Efusiones del alma enamorada de Dios…

3033 IMG_8691.JPG«Y por esto mi agradecimiento, en las efusiones de mi alma hacia ti, en el beso de tu boca divina, sin osar abrirse la mía y sin más contacto que tus labios, mi alma se deshace y se escurre toda por los ojos, ¡ya que sólo mis lágrimas pueden traducir los sentimientos que embargan este miserable corazón!»

Ejercicios Espirituales de 1962.

Un amor de locura…

2972 Como una flor.jpg«¿Cómo es posible que sigas amándonos?, ¡si ni siquiera las almas que te pertenecemos de manera especial hemos correspondido a este amor de locura, que es el tuyo!»

Ejercicios Espirituales de 1962.

 

Así nos ama el Señor…

2950 Copia de 334 Beata jpg especial cuadrada.jpg«Así me amas, sí Jesús, ¡yo sé que me amas con amor infinito!, sé que me amas, porque eres Jesús; sé que me elegiste y me previniste desde toda la eternidad. Y aquí se presenta en el correr de mis años vividos en esta tierra la serie interminable de tus gracias, de tus dones, de tus amores. ¡Qué mal gusto tienes Jesús! ¡Pero cuánto te agradezco tu predilección!»

Ejercicios Espirituales de 1962.