«Feliz año nuevo les deseo con todo mi corazón, pidiendo al Señor para ustedes un cúmulo de nuevas gracias que serán fuente de salvación para muchos hermanos que durante este año también necesitan de su generosa entrega misionera».
Carta del 4 de enero de 1980.
«¿Y cómo he aprovechado este año que se me ha concedido, tan literalmente, un año tan lleno de gracias, de beneficios de mi Dios, de dulces ternuras de su amor?»
Diario 1932-1934.
«Procuremos ocupar siempre nuestro tiempo en cosas útiles, hagamos actos de caridad».
Consejos.
«¿Su porvenir?… no le inquieta, reposa en el Sagrado Corazón de Jesús y se aferra a los brazos de su Madre Santísima».
Consejos.
«Quiero recordarles, hijos, aquel gesto heroico de santa Teresita: en la hora libre de cada día, ella, en lugar de aprovecharla para sí, iba a buscar a las hermanas más desagradables para que le pidieran favores. ¿Verdad que podríamos imitarla?»
Carta colectiva del 6 de noviembre de 1973.
«Les encargo mucho la puntualidad a los actos de comunidad».
Carta del 24 de enero de 1959.
«No creamos que el tiempo que estemos allí en adoración rogando por tantas necesidades y también adorando al Señor, es tiempo perdido; al contrario ahí se alcanzará el fruto de la misión”.
Carta a un grupo de religiosas en abril 15 de 1971.
«El saber sonreír en toda circunstancia, penosa o alegre, el saber vivir el momento presente con la alegría de los hijos de Dios… será ya anticipadamente un paraíso en la tierra”.
Carta a sus hijas en Nigeria, 27 de feb. 1977.
«Ya no me quiero quejar del tiempo, pero es demasiado avaro para mí»
Cartas.
«No olvidemos que el tiempo es breve, además no sabemos si ya nos queda poco para llegar a la eternidad. Pueden ser unos meses, unos años. Vivamos cada día como si fuera el último, y de manera que a la hora de la muerte no sintamos haber perdido el tiempo».
Cartas.
Un pensamiento de la Beata Madre María Inés Teresa 